Las bases militantes deben orientar el nuevo rumbo del PRI: Lucas Vallarta.
• Cortar cabezas en este momento no es sano. La actual dirigencia debe continuar.
Oscar González Bonilla
“Tengo que aguantar, más no acordar”, expresa así José Lucas Vallarta Robles al referirse a la mala jugada que el PRI le hizo a su hijo Jorge “El Peque” Vallarta Trejo, a quien de un día para otro lo despojaron de la candidatura a diputado por el primer distrito electoral federal de Nayarit.
Añoso militante priista no guarda resentimiento, tampoco es esa razón para decantarse por el grupo de militantes inconforme por el resultado de las elecciones del pasado domingo 1 de julio, mismo que ahora exige reestructuración total de los mandos de dirigencia del partido en la entidad.
El doctor (Odontólogo de profesión) Lucas Vallarta es proclive a la toma de decisiones por medio de la base militante respecto a la reestructuración del PRI de Nayarit, “pues no podemos ir sobre el criterio particular de nadie que pretenda manejar al partido; tendremos que buscar la manera de que las bases nos orienten ahora con el propósito de saber cómo quedará el partido, evitar se profundice la crisis, al tiempo que unidos trabajemos en la recomposición del partido para de nuevo organizados entremos a la batalla política”.
Arrellano en una especie de reposet en oficina que hace algún tiempo ocupa en el despacho de la calle Veracruz al norte, frente al edificio de Palacio de Gobierno en Tepic, el doctor Lucas Vallarta desde allí se manifiesta en contra del cambio de presidente del comité directivo estatal, así nomás de golpe y porrazo.